¿Te rodeas de la gente adecuada? 😉

Parte 1 de 2

A la pregunta de ¿qué fue primero? Si el huevo o la gallina, la mejor respuesta es: el nido.

Donde hay condiciones para que un tipo de vida se dé, esta se dará.

En el caso de los negocios o en el del crecimiento de tu carrera pasa igual.

Los resultados se potencian cuando estás en el entorno adecuado, recuerda, si quieres aullar mejor, debes rodearte de lobos, de los mejores. En África, los zulúes llamaban a esto ubuntu, expresión que se traduce más o menos como: una persona es persona gracias a otras personas.

El entorno cuenta, a la larga incluso más que el talento; podemos traer al mejor emprendedor de Silicon Valley a un país como México y veremos muy probablemente que no logrará tanto como un emprendedor regular de aquí que llevemos hacia allá.

Silicon Valley es un nido, es un ambiente favorable para crecer ideas, nutrido de fondos de inversión, abogados, mentores y condiciones en general que han permitido crear nuevo conocimiento, nuevas habilidades, nueva tecnología y nuevos negocios por décadas.

No es tu genio por sí solo lo que generará tu crecimiento, con todo y que tenerlo te facilitará mucho las cosas, es el ecosistema en que te desenvuelves. Migra hacia uno o genera el propio, pégatele a la mejor gente: aliados, mentores, socios, colaboradores, proveedores, gente cuyo consejo e influencia te ayude a escalar.

Según el célebre escritor Malcolm Gladwell, “normalmente cometemos el error de sobreestimar la importancia de los rasgos fundamentales del carácter y minusvalorar la importancia del contexto y de la situación” (2007), “algunos estudios demuestran que un niño crece mejor en un vecindario bueno, aunque su hogar esté lleno de problemas, que si vive en un barrio problemático aún   en el seno de una buena familia”; así pesa el ambiente.

Los grandes logros nunca son uni-factoriales, nadie logra jamás nada importante estando solo, ninguno de nosotros es tan inteligente como el resto de nosotros juntos; la idea más extraordinaria necesita de las aportaciones de otros para hacerse realidad, se necesita fricción con otros talentos, se ocupa una comunidad para hacer evolucionar algo, nadie puede construir un lápiz solo, nadie puede servir un taco solo, se necesita de una red de talentos alineados en torno a tu idea.

Con la terrible tradición que tenemos en países como México de no saber hacer equipo, sin duda la mayor innovación que podemos hacer hoy es conectar, unos con otros, y con el mundo entero, superar nuestro profundo no-querer-trabajar-juntos y mostrar una disposición colectiva a imaginar y construir un futuro compartido con Maestría.

Agrupémonos, hagamos alianzas, conectemos con gente que nos ayude a llegar al siguiente nivel en nuestras carreras y en nuestros negocios. El crecimiento requiere de una masa crítica de talento circundante que potencie las ventajas de todos.

Darwin documentaba que el hombre primitivo ya practicaba una división del trabajo, no manufacturaba sus propias herramientas o vasijas, alguien se dedicaba a ello y sin duda recibía recompensas con otros productos que alguien más hacía, derivados de la caza por ejemplo. “La prosperidad no es más que tiempo ahorrado, lo cual es directamente proporcional a la división de trabajo. Dedicar menos tiempo a producir harina implica más tiempo a producir una pizza, y ambos pueden significar empleo para dos personas diferentes” a decir de Ridley (2010:17).

La prosperidad humana ha sido desde siempre el resultado de la integración de los recursos propios con los de los demás. Conecta con las mentes de los dueños de los activos complementarios que te sirvan para apalancar tu crecimiento. Apalancarse es la capacidad de hacer más con menos y el poder de la mente en conexión con otras es el apalancamiento absoluto.

En México nuestra capacidad intelectual y creativa es alta, y quizá más la de trabajar y ejecutar con dedicación, pero por alguna razón hemos carecido de la voluntad de establecer vasos comunicantes para capitalizar todo lo bueno que hacemos. Hagámoslo ya, cada uno, en la suma terminaremos por configurar un ecosistema genial.

Sé un articulador y expande tus alcances.

Fe y oficio.

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