Multiplica tus habilidades sin poseerlas: 🤜🤛 crea una mente colectiva.

Michael Jordan, reclutado por los Bulls de Chicago en 1984, no ganó un solo campeonato durante sus primeros seis años en la NBA, entonces llegó el coach Phil Jackson en 1989 e instaló una ofensiva triangular, una estrategia para crear más pases para que los jugadores tuvieran más espacio para tirar, así, los Bulls ganaron los siguientes seis campeonatos. Al parecer, el genio que convirtió a Jordan en el mejor jugador de basketball de todos los tiempos siempre estuvo ahí, pero no sólo hasta que la gente alrededor se conectó de una forma singular, pudo detonarse.


¿Qué tal si los siguientes grandes logros en tu vida no dependen de ti sino de la gente alrededor?

El psicólogo organizacional Benjamin Hardy, en su libro Quién, no Cómo, plantea una idea simple: tu crecimiento no depende de los cómos sino de los quiénes que saben los cómos y te ayudan a avanzar; dicho de otra forma, no se trata de saber sino de tener el teléfono de los que saben, y hablarles.

En libro clásico Piense y hágase rico, Napoleon Hill describe cómo los abogados de un periódico de Chicago intentaron demostrar que Henry Ford no era la persona que más sabía sobre la incipiente industria automotriz, le hacían preguntas técnicas que sabían que él no sabría responder, cansado de los cuestionamientos él les dijo que simplemente con descolgar el teléfono podría traer a su gente para responderles todo lo que necesitaban saber, lo que básicamente les dijo fue que para construir algo valioso no necesitaba dominar los Cómos sino de tener acceso a los Quiénes que los dominan.

Cuando te concentras en hacer todo tú mismo estás limitando drásticamente lo que puedes lograr. El hecho de que seas bueno para algo no quiere decir que hagas todo lo relativo a ese algo, conecta con gente alrededor tuyo, el talento circundante puede multiplicar tu perspectiva, recursos y capacidades y hacerlo a una velocidad mayor a la que tú podrías hacerlo por tu cuenta. Una meta es por definición algo que está más allá de tu estado actual, por ende supera tus capacidades, entonces te conviene desarrollarlas o atraerlas, Hardy promueve lo segundo (2020:46), sugiere que en vez de que te preguntes ¿cómo hago esto?, te preguntes ¿quién puede ayudarme con esto?

Tú eres bueno en algo, enfócate en ese algo y deja que otros (y la tecnología) te ayuden con lo demás, define tu contribución única y enfoca tus esfuerzos ahí donde esté tu mayor impacto, domina lo nuclear y luego encuentra uno o varios Quiénes que te ayuden con lo demás, deja el ego a un lado, valora a las personas alrededor, hay más gente que puede hacer las cosas incluso mejor que tú. No sacrifiques tu expansión por un aparente control, delega, apóyate en otros y si piensas que te saldrá más caro eso en vez de hacer todo tú mismo solo calcula cuánto cuesta una hora de tu tiempo, ya sabes, dividiendo lo que ganas en un año entre el número de horas que trabajas, y te darás cuenta de que invertir en especialistas alrededor es una gran inversión; los Cómos te toman tiempo, los Quiénes te aceleran. Multiplica tus habilidades sin tener que poseerlas.

En la escuela nos formaron en los Cómos y nos castigaron cuando pedimos ayuda a los Quiénes, siempre se ha considerado trampa, pero así no funciona la vida real, colaborar es clave, nadie logra nada estando aislado; dondequiera que veas a alguien logrando algo, hay colaboración. Newton decía que hizo lo que hizo por subirse a hombros de gigantes; John Tolkien, autor del Señor de los Anillos y Clive Lewis, autor de las Crónicas de Narnia, compartían interés por la mitología nórdica y, mientras daban clase en Oxford, se subían a los hombros del otro intercambiando ideas en el pub del campus, esa solidaridad hizo que sus obras trascendieran. Encuentra tu pub o encuentra tu comunidad, quizá puedas sobrevivir sin una pero no prosperarás sin una.

Pide ayuda y muy importante, corresponde, nutre tus relaciones, no las veas como algo transaccional, no entres a ninguna relación solo esperando algo a cambio, no entres pensando qué hay para mi, si solo das a condición de recibir, tu red y tu alcance serán cada vez más estrechos. Mejora la vida de quienes te rodean, así te ayudarán a mejorar la tuya, paga por adelantado, evidentemente habrá quien se quiera aprovechar de ti porque para algunos una relación es un recurso a explotar, algo a lo que hay que sacarle todo lo que se pueda, aléjate de ellos y continúa tu búsqueda en otra parte y conviértete en un quién importante para otros.

Todo lo que necesitas para crecer lo tienen otros, no está necesariamente en ti. La calidad de tu vida depende de la cantidad y calidad de la gente con la que interactúas, crece y gana más relacionándote mejor, no te quedes del mismo tamaño, expándete a través de los demás, hazlo con Maestría.

 

Fe y oficio.

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