Crece con Maestría

View Original

Un negocio es una rueda: hazla girar. 😀

La creación de algo extraordinario nunca pasa de repente.

Como dicen algunos, el éxito de la noche a la mañana suele tardar años.

El crecimiento de tu negocio no depende de una acción específica ni de un determinado producto, no deriva de una estrategia en particular ni pasa por suerte, pasa por el esfuerzo consistente y combinado de muchos componentes que operan bien a lo largo del tiempo.

El célebre consultor empresarial Jim Collins, en su libro girando la rueda, explica el crecimiento de un negocio con una metáfora simple: es como hacer girar una rueda grande y pesada, no hay un esfuerzo específico que la haga girar, es más bien el cúmulo de muchos pequeños empujones lo que, en suma, genera el movimiento, al principio girará poco y con mucho esfuerzo, pero en cada vuelta, si te mantienes constante, girará más y cada vez con menos esfuerzo. ¿Qué tan bien gira tu rueda hoy? Dibuja un círculo virtuoso con las actividades críticas que crees que te llevarán al éxito que quieres.

Según el editor Brad Stone en su libro The Everything Store, Amazon diseñó su rueda en torno a cuatro premisas: cuanto más económicos fueran sus precios, más clientes tendrían, y cuanto más clientes llegaran, más proveedores querrían vender en la plataforma, con más ventas, Amazon tendría mejores costos y con tal eficiencia los precios se reducirían más; cada premisa, bien identificada y bien operada respecto a todas las tareas que implique, impulsa el logro de la siguiente.

Si tu rueda está atascada hay dos explicaciones según Collins: sus componentes no embonan o no funcionen bien, en cuyo caso debes sustituirlos, arreglar su secuencia o mejorarlos, o bien la rueda ya no es vigente, ya con encaja en la realidad del mercado, y entonces deberás modificarla; haz ambas cosas, optimiza todo el tiempo cada punto de tu operación mientras creas nuevas oportunidades de ganar, adopta esa dualidad, haz que lo que ya funciona lo haga de maravilla pero también disponte a innovar. Innovar para continuar suena a paradoja,pero es lo que debes promover desde la Dirección, es lo que justifica tu posición de liderazgo. Eso de no le muevas si funciona bien solo te pondrá vulnerable ante emprendedores advenedizos que ya le están moviendo aunque no los veas.


👉 Lee también: Equilibrio vida-trabajo ¿puede existir? 😉


Diseña, engrasa y actualiza tu rueda. Define bien sus componentes clave, asegúrate de que la secuencia sea la correcta, que cada resultado previo favorezca al siguiente, supervisa el buen funcionamiento de cada parte, descubre cómo acelerar su impulso y, desde luego, lidera bien a tu equipo para que todos empujen en la misma dirección, hazlo con Maestría.

Fe y oficio.

Comparte 👍 y suscríbete.